Si eres de esas personas que piensa que todo se le dará pese a no haberlo merecido, ten por seguro que nunca aparecerá La Justicia en tu tirada de tarot. Este VIII Arcano Mayor de la baraja representa lo contrario, es decir, el logro tras realizar el esfuerzo en la búsqueda de la recompensa.
Porque si das, serás recompensado. Es decir, que estamos ante una especie de trueque como a la antigua usanza. Un intercambio del mismo valor que simboliza esos tratos en los que un individuo ha puesto mucho de su parte y ahora obtiene su justo premio tras el trabajo realizado.
La igualdad de La Justicia
Solo logrando el equilibrio en la balanza conseguiremos que aflore La Justicia. El esfuerzo realizado en pos de un objetivo y la propia sensatez del intercambio justo. Eso es lo único que permite a esta maravillosa carta que aparezca.
Porque en este caso el VIII Arcano Mayor no tiene los ojos vendados. Ahora sabe muy bien lo que ve, lo que observa y lo que realmente es justo. Es decir, que nada que no merezcas de forma sincera te será concedido si no has trabajado previamente en su consecución.
Esta carta no permite que nadie mancille los derechos de otra persona. Sus principios son la prosperidad y el respeto por lo ajeno. La búsqueda del equilibrio coherente no solo de sentimientos y pensamientos, también de propiedades y bienes materiales.
Así pues, allá donde se encuentren injusticias, falta de parcialidad y el padecer de las personas por falta de comprensión, aparecerá la más justa de todas las cartas del tarot. Y lo hará para plantear la situación con sentido común y lograr la solución consensuada y cabal.
Representa a cada persona que sea justa consigo misma, con lo ajeno y con su entorno. No ha de haber necesidad ni capacidad de acusar en balde. Debe poseer un karma equilibrado y sentido, con cualidades espirituales bien cuidadas y trabajadas. Un ser amoroso, paciente, capaz de sacrificarse por sus objetivos con buena voluntad y ánimo, planificando a largo plazo sus consecuciones. Todas estas cualidades se verán perfectamente representadas en el mundo del tarot gracias a La Justicia.
La perversión de La Justicia en la inversión
Entre las dos caras de la moneda que tiene la realidad, La Justicia siempre puede aparecer en una tirada de forma invertida. En este caso encontramos toda la negatividad de la que es capaz este Arcano Mayor.
Al aparecer invertida se convierte en todo un símbolo de injusticia, poder exacerbado e innecesario que obra con malignidad. Sus actuaciones son egoístas y en busca del beneficio propio sin pensar en el prójimo. Un ser que obtiene premios y réditos gracias a sus delitos, con total ceguera. Siempre está en desventaja y haciendo uso de propaganda vacía y vacua, provocadora de coas y sufrimiento. Su mundo es como una prisión para el alma que es juzgada con exceso de severidad y sin ningún tipo de compasión.
Sea como fuere, el simbolismo más puro de La Justicia, el VIII Arcano Mayor del tarot, es el derecho sin mácula. También la diplomacia y ética. Las actuaciones rectas, con un código de conducta acertado, en pleno equilibrio. Todo ello siempre estará representado en el poder de esta carta.