En otros posts, os hemos hablado de los Ángeles y de las jerarquías que se establecen entre ellos. De hecho, siempre decimos que los Ángeles están cerca para ayudarnos y guiarnos, pero esta información queda lejos de la realidad. Lo cierto es que la orden angelical es mucho más compleja de lo que muchos conocen y esto hace que haya malos entendidos a la hora de pedir ayuda, de conocer los diferentes ángeles, etc. Es por ello que, además de hablaros de la jerarquía entre ellos, os vamos a explicar en detalle qué son los Serafines y cuáles son sus misiones.
Jerarquías de los Ángeles: los Serafines, los primeros
Los Ángeles tienen una jerarquía propia en la que se establecen tres niveles diferentes con tres grupos de Ángeles en cada uno de ellos. En la primera jerarquía, encontramos los Serafines, los Querubines y los Tronos. En la segunda jerarquía, tenemos las dominaciones, las virtudes y las potestades. Y, en la tercera jerarquía, tenemos los principados, los arcángeles y los ángeles.
Así pues, cuando hablamos de los Serafines, estamos hablando de los primeros ángeles de la primera jerarquía. Es decir, los más importantes dentro de su orden. Sin embargo, por la misma definición, podemos decir que son los que están más lejos de las personas.
Misiones de los Serafines
Como sucede con todos los tipos de ángeles, los Serafines tienen sus propias misiones. Básicamente, se puede decir que los Serafines son los más importantes y que se encuentran cerca del trono de Dios. Son sus encargados y van moviendo y regulando el cielo de la forma en la que Dios les manda. En este caso, estos ángeles son representados con tres pares de alas con ojos. Les sirven para protegerse de la luz de Dios.
Los Serafines tienen varios pasajes dedicados en la Biblia y es que al ser tan importantes; son también de los que más se habla. Son seres superiores que no están para nada en contacto con los humanos. Se limitan a cumplir las órdenes de Dios en cuanto a la regulación del Cielo. También son los que están a su lado y cantan alabanzas a Dios.
Es por ello que, no podemos hacer una oración, por ejemplo, invocando a un Serafín. Por mucho que lo hagamos, será imposible recibir una respuesta de ellos y es que sus misiones quedan muy lejos de la Humanidad. Para ello, tenemos otros ángeles que están dedicados en exclusiva a las personas, a cuidarlas y guiarlas, pero estos no se encuentran en la primera jerarquía.
Los Serafines, pues, son los seres de luz superiores dentro de su orden y son los que están en contacto con Dios. Por su importancia, su representación es diferente a la de los demás, ya que tienen más pares de alas. Sus misiones solo salen de Dios y se encargan de que los demás hagan sus funciones como ellos.