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Las velas negras

Cuando hablamos de velas negras, la gran mayoría de las personas las asocian a la negatividad e, incluso en ocasiones, a la muerte. No obstante, su significado real poco o nada tiene que ver con este concepto. Las velas negras son muy utilizadas en la magia blanca para eliminar el mal de ojo. Hay que tener en cuenta que el negro no es más que la concentración de todos los colores de la gama cromática; por lo tanto, las velas negras se pueden utilizar de manera complementaria a velas de cualquier otro color como por ejemplo las rojas en rituales de amor y pasión, o las blancas para hechizos de paz y armonía. Por lo tanto, es el momento de decir adiós a los pensamientos negativos en torno a las velas negras.

¿Para qué sirven las velas negras?

Protegerse de las energías negativas

El uso más extendido de las velas de este color es para protegerse de las energías negativas, o, en el caso de que una persona ya haya sido maldecida por un mal de ojo, para eliminarlo.

Actualmente, vivimos en un mundo en el que las envidias por desgracia son algo muy común. Por lo tanto, siempre hay personas que se dedican a lanzar hechizos negativos para dañar y perjudicar a otras. En este tipo de casos, las velas negras son indispensables para eliminar las energías negativas del cuerpo y del alma.

Superar una ruptura

Claro que ese no es el único uso de las velas negras. Este tipo de velas también se utilizan en rituales de magia blanca de alejamiento o separación. Simbolizan la eliminación de todo lo negativo, así que son fundamentales en hechizos de magia blanca en los que se quiera alejar a la otra persona sin daño alguno, simplemente que se marche por sí misma.

Hechizo para alejar una persona que te hace daño con velas negras

Si quieres alejar a una persona que te hace daño de tu vida, una vela negra es fundamental. El ritual es muy sencillo. Simplemente tienes que escribir el nombre de esa persona en un papel de color blanco, con una pintura o rotulador de color negro; el nombre debe estar escrito de manera clara y legible, para que no haya confusión. Luego, coloca el papel debajo de un vaso colocado boca abajo y sitúa la vela de color negro justo detrás del vaso; enciéndela con una cerilla. Recita la siguiente oración en voz alta y clara: “No deseo sufrir más. Aléjate. Aléjate de mí”. Deja que la vela se consuma del todo mientras te concentras en cómo esa persona sale de tu vida y no vuelve a hacerte más daño. Cuando se termine de consumir la vela, toma los restos de cera y el papel y arrójalos a un río o un arroyo; un lugar por donde corre el agua.

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